15 Aniversario de la muerte de Mons. Fuentes

Sonriendo y muy sereno,

nos dejó el obispo Eduardo

Como amigo y padre bueno,

hoy queremos recordarlo.

     Hoy celebramos el 15 aniversario del dies natalis de Mons. Eduardo Fuentes, segundo obispo de esta Diócesis conocida como “de Sololá”.

     “Celebramos”, porque para los cristianos la muerte no es una realidad negativa, ya que Jesucristo nuestro Señor la transformó en instrumento de salvación, paso necesario para Vivir.

     Ayer estuvimos afanosos de preparar esta conmemoración, y hoy lo hemos hecho encomendándole especialmente en la celebración de la Santa Misa en Catedral, concelebrada por cerca de cincuenta sacerdotes, dos obispos –Mons. Gonzalo, nuestro actual obispo, y Mons. Raúl Antonio, anterior obispo de Sololá y actual auxiliar de la Arquidiócesis primada- y tres diáconos, además de algunas religiosas y muchos feligreses. También le tuvimos muy presente en el rezo de Laudes y Vísperas.

     Además de suspenderse las clases por este aniversario, también hemos tenido una entrañable tertulia entre Mons. Gonzalo, algunos sacerdotes y los seminaristas, recordando a Mons. Eduardo, su figura, su trabajo y su legado. Fue bien acogido el pequeño y sencillo documental que se hizo de su vida, que revelaba la vida de entrega que tuvo este obispo.

     En la Diócesis tenemos la suerte de haber recibido su legado y nos toca custodiarlo y cultivarlo; parte de ello es la consolidación de este seminario en el que tengo la suerte de trabajar y ayudar en la formación.

     Desde el Cielo intercede por nosotros.

     He tomado las fotografías de la página de Vida Diocesana.

Al comienzo de la celebración de la Santa Misa.

Junto a la sepultura de Mons. Eduardo y ante a la Virgen de los Dolores, patrona de la Diócesis.

Los objetos expuestos que pertenecieron a Mons. Fuentes.

Durante la tertulia de después del almuerzo.