Hoy concluimos nuestro curso sobre formación humana

    Ni mucho menos pensamos que los sacerdotes ya estamos pulidos, ya nos hemos formado perfectamente. Quien es medianamente humilde caerá en la cuenta de que siempre necesita seguir formándose. También los formadores...

     Hoy, los formadores de los seminarios de Guatemala, hemos terminado un curso en el ámbito humano, no sólo para tener herramientas para la formación sino para, principalmente, que lo apliquemos a nuestra propia lucha y circunstancias, para nuestra entrega en este ministerio.

      El curso nos lo ha impartido el P. Benjamín García, sacerdote de Sevilla, que tiene mucha experiencia en el campo del acompañamiento. Nos ha invitado a profundizar en nuestra propia experiencia de vida, conocernos a fondo, también nuestra historia personal, que puede dar respuesta a lo que somos y cómo podemos mejorar.

     Personalmente es muy aprovechable, ciertamente, pero lo es más para este trabajo de la formación de los futuros sacerdotes.

     ¿En dónde tuvimos el curso? En esta ocasión, estuvimos en un hotelito acogedor de Santiago Atitlán. Tuvimos, además, la colaboración insustituible de los Amigos del Seminario, del párroco (el P. Alfredo) y de toda la comunidad parroquial, a quienes agradecemos su hospitalidad.

     Para los formadores visitantes de nuestra Diócesis, la recepción fue maravillosa, especialmente en la Santa Misa de la Víspera de Domingo que tocó celebrar. Para los feligreses fue todo acontecimiento ver a tantos sacerdotes y con este trabajo concreto. Para los foráneos, fue impactante la experiencia de fe de la comunidad. Eso les invita a seguir creciendo en la fe.

     Habiendo comenzado el curso tuvimos la triste nueva de la muerte de doña Delia, la mamá del P. Víctor, Rector de nuestro Seminario. Unos cuantos pudimos acompañarle durante la velación en la casa, el día de ayer. La Misa exequial celebrada hoy en San Lucas Tolimán fue muy concurrida, muestra del aprecio a doña Delia, a su familia y al P. Víctor. Mons. Gonzalo presidió la celebración; concelebramos una treintena de sacerdotes. Acompañamos con nuestras oraciones al P. Víctor y a su familia.

Ayer, antes de la celebración de la Misa, por la tarde. Desde el interior del "convento parroquial", vista del campanario y del Volcán de San Pedro. Pueden fijarse que en el campanario hay dos hombres, uno de pie y el otro sentado.

Hoy hice esta foto, de un mural que tienen en el jardín del hotel, que tan bien nos hospedó.

La foto final de los participantes, formadores de los tres seminarios.