Pero, si no se usan bien, pueden desviar nuestra atención de lo que es importante. No debemos olvidar que la tecnología y los aparatos son instrumento; lo que vale de verdad es la persona, el prójimo y la familia. A los pequeños hay que enseñar a servirse bien de un celular, por ejemplo (aunque hay quienes no están a favor de dar celular a los pequeños), pero también los "grandes" podemos embobarnos en su uso que se nos puede pasar el tiempo sin darnos cuenta.
Se ha dado en llamar "nomofobia" a la adicción a estos medios. Cada uno examine cómo lo usa, para que no pierda, al menos, el tiempo.
En la página "Protección Online" encontré estos cuestionarios. Pueden leerlos y ver qué tanto abusamos -¡no!-, qué tan apegados estamos al CELULAR, al INTERNET y al CHAT.
¿Estarías dispuesto a dejar tu celular una hora?
No hay comentarios:
Publicar un comentario