Misa rogando a Dios por la canonización del Beato Stanley Rother

Hace unos días me sorprendieron con una llamada, invitándome a celebrar la santa Misa pidiendo a Dios la pronta canonización del Beato Stanley Francis Rother, martir de EE.UU. y Santiago Atitlán, mártir de la Iglesia.

En verdad, si no se promociona su imagen, si no se difunde su devoción, tal canonización no llegará. Además, tomando la frase tan conocida de San Ignacio, si no llega, no redundará "para mayor gloria de Dios".

Un grupo de devotos de aquí de la Ciudad de Guatemala, me pidió el favor de celebrar dicha Misa. La celebramos hoy en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios, El Calvario, en la zona 1. La santa Misa la celebramos después de la proyección de un documental sobre la vida del Beato.

Entre tantas cosas que se pueden resaltar del testimonio del Beato, me alegró mucho aplicar el evangelio de la Misa de este domingo (la parábola del rico que vivía espléndidamente y el pobre Lázaro): el P. Apla's, escuchando la llamada de Dios, dejó su familia y su patria para venir a servir a los indígenas de Santiago Atitlán ('indígena' significa 'natural', 'del lugar'); no fue como el rico que vivía de modo egoísta sino se hizo como uno del lugar, se hizo un 'indígena' con los indígenas tzutuhiles. Al final, entregó su vida como testimonio de su unión con los indígenas, como testimonio de su amor por Dios y las almas.

De hoy, en la Misa.

Aquí, unas líneas sobre su vida.

P. Apla's, ruega por nosotros.

¿Qué podría escribir?

Espero no llegar a la edad de Bilbo para escribir algo...

¿Qué hacer cuando se ha agotado la imaginación para escribir? Escribe uno una línea y pronto se desiste y se vuelve a borrar. No empareja una palabra con otra, y las ideas parecen volar y volar, sin encontrar reposo. Hay teclas suficientes para escribir tanto, pero se resisten a construir algo consistente. Hay tanto de qué escribir y temas que interesarían a más de alguno leer, pero faltan las ganas. Hubo un tiempo en que cualquier nonada servía para hilar palabras y bordar un tema, pero ahora parece que ese tiempo se ha esfumado. ¿Volverá algún día? Encima, el escritor puede preguntarse si a alguno interesará alguna línea escrita en este blog... Y tampoco la presentación del blog es muy atrayente...

II Encuentro Nacional de Candidatos al Seminario Mayor 2019

Entre ayer y hoy hemos tenido la enorme alegría de recibir a los jóvenes de todo el país que tienen intención de, ingresando al Seminario Mayor el próximo año, comenzar su preparación para ser sacerdotes. En este segundo encuentro asistieron 77 jóvenes, procedentes de todas las diócesis y vicariatos de este país.

Este año ha ido consolidándose el proceso de selección de los candidatos: después de una selección de los jóvenes en la propia diócesis durante el primer semestre, jóvenes a quienes sus párrocos han conducido a la comisión diocesana de vocaciones, realizan en el Seminario Mayor en el segundo semestre sus cuatro encuentros.

En este segundo semestre se ayuda a los jóvenes a plantearse más directamente un posible ingreso al Seminario, ayudándoles con entrevistas y temas y ambiente de oración para su propio discernimiento, confiando en que, al final del proceso de selección, sean más conscientes del paso.

Hoy hemos confiado a María Santísima, patrona del Seminario y cuya fiesta del nacimiento celebramos, a cada uno de los jóvenes, muchos de ellos futuros sacerdotes.

Buen viaje y buena estancia en Roma, P. Rómulo

El P. Rómulo, a la izquierda.

Ayer el P. Rómulo Chajón tomó viaje hacia Roma, con el fin de realizar estudios de Teología Bíblica. El P. Rómulo pertenece a la diócesis de Jalapa y se ha dedicado, hasta hace pocos días, a la formación: fue formador casi cuatro años en el Propedéutico del Seminario de la Asunción.

Me recuerdo de su entusiasmo, de su fraternidad, del ímpetu que tenía para el deporte. Un gran amigo.

El Señor te bendiga e ilumine en esta nueva etapa, querido P. Rómulo. Que aprendas mucho de la Biblia y que, después, nos lo vengas a compartir.

Sus oraciones por Perla, por favor.

Tiempo de alegrías, tiempo de penas. Las penas son más llevaderas cuando se lleva entre varios, especialmente las de la familia.

Miembro de una familia amiga, a Perla le dio ayer un derrame cerebral. Es posible que sea sometida a cirugía. Le hemos dado el Sacramento de la Unción.

Les ruego sus oraciones por ella. Dios dirá lo que suceda, pero estamos pidiendo Su benevolencia para que, como siempre, nos auxilie.

Video del Papa: septiembre 2019. El cuidado del mar