Día de agradecimientos y despedidas

      Hoy termina el año académico y mañana los alumnos se irán a sus casas. Hoy hemos entregado las tan esperadas calificaciones.

     Hoy comentaba el P. Víctor, el rector: “Trabajo ha habido suficiente; podemos estar cansados, pero aburridos, ¡no!” En efecto, hemos empleado tantas horas y días en este quehacer de la formación de los futuros sacerdotes, que confiamos en Dios tengan sus frutos.

     Está previsto que, después de una semana de descanso, puedan incorporarse a su encargo pastoral. Este año, como parte de la formación, los estudiantes de teología tendrán un mes de pastoral, mientras que los filósofos tendrán dos semanas, además de una semana de convivencia durante las vacaciones.

      Por el momento, un pequeño respiro de las actividades, intentando reponer fuerzas, bachear las grietas surgidas por el desgaste anímico. Confiamos a Dios la vocación de cada uno de nuestros seminaristas.

Éstos son los alumnos que culminaron su formación en el Seminario. De izquierda a derecha: Carlos, Néstor (Mons. Gonzalo), Edwin e Irvin. Confiamos a Dios su próxima etapa vocacional, camino a la ordenación sacerdotal.