Esta semana ha sido de exámenes de final de semestre. Hoy será el último día. Los profesores hemos tenido un poco más de “tranquilidad”, pues los alumnos están muy pero muy ocupados, “remachando” sus conocimientos para presentarse a examen.
¡Pobrecitos! Qué cara de preocupación han tenido y tienen, a los que todavía les resta algún examen. Alguno nos acusa de estar “castigando” a los alumnos por lo que no han hecho, incluso, por lo que hemos sufrido nosotros los profesores siendo alumnos. Nada de eso. Simplemente es un “incentivo” para el estudio, un “encuentro entre el alumno y lo que sabe de verdad”, o al menos lo que ha aprendido en el último instante.
La perseverancia tiene su recompensa.
Sin embargo, el objetivo es mucho más alto: seguirlos formando para que lleguen a ser "buenos pastores", a la medida de Cristo, Buen Pastor"...
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