Un libro que me está ayudando mucho para tener luces cómo ayudar a las almas que se acercan, pero también para mi propio provecho espiritual, es el de Francisco Fernández Carvajal llamado “Para Llegar a Puerto”. A todos los directores de almas aconsejo vivamente su lectura. Disertando sobre las cualidades de un buen pastor, y siguiendo a Santo Tomás de Villa Nueva, propone:

     “Cuatro son las condiciones que debe reunir el buen pastor, según señala santo Tomás de Villanueva. En primer lugar, el amor: fue precisamente la caridad la única virtud que el Señor exigió a san Pedro para entregarle el cuidado de su rebaño, después de las negaciones; el Señor se sigue fiando de él, a pesar de haber fallado en aquella noche tan especial. Luego, la vigilancia, para estar atentos a las necesidades de las ovejas, para darse cuenta de cuándo un alma ha comenzado a alejarse del Señor o cuando Dios le pide ‘más’. En tercer lugar, la doctrina, para alimentar las inteligencias de quienes ayuda, con el consejo oportuno, evitando que las personas caigan en los errores del ambiente, sugiriendo a su tiempo la lectura espiritual adecuada. Y, finalmente, la santidad e integridad de vida; esta es la principal de todas las cualidades, porque solo así será un buen guía que conoce los caminos y los peligros que acechan al rebaño”.