Vivir al día

    Le he sacado una foto a esta vela, conmemorativa de la JDJ 2013, en Comalapa. Muchos se recordarán de esa gran actividad en la que nos reunimos miles y miles en el Domingo de Ramos de ese año. Sí, así se va forjando la historia. Ojalá, con la ayuda de Dios, sigamos sacándole frutos.

     Esta vela la prenderemos y arderá mañana junto al Sagrario, "la vela del Santísimo", en el Seminario, como una actualización de la ofrenda hecha en ese año. Podríamos guardarla, ciertamente, para que nos recuerde lo acontecido, pero creo que podríamos prescindir de ella, ofreciéndola a Dios como, decíamos, una ofrenda.

    En cierta ocasión leí una reflexión similar: no hemos de esperar ponernos una prenda o guardar algo para una mejor ocasión, la ocasión ideal, querer decir algo pero que nos quede sólo en el deseo, porque esa ocasión ideal nunca llegará. Mejor ahora. Con todo, es mejor vivir al día, intentando hacer de nuestro día un día agradable a Dios.

     Algo similar sugería la Madre Teresa de Calcuta con la inscripción que hizo poner en sus casas, como un recordatorio al sacerdote que celebraba la Misa: "Celebra la Misa como tu Primera Misa, como tu única Misa, como tu última Misa".