Les adelantaba ayer que hoy escribiría sobre ello.
En la fiesta de la Santa Teresa, proclamada Doctora de la Iglesia por Pablo VI, se ha seguido una tradición en el Seminario: la premiación del concurso Virgen del Camino, encaminado a promover e incentivar el estudio de teología, filosofía y humanidades, dirigida a los alumnos del Seminario Mayor.
El concurso, ahora en su 16ª. convocatoria, ha tenido más participación en el área de teología (12 trabajos) que en el de la filosofía y humanidades (4 trabajos). El primer lugar de teología fue para un trabajo que abogaba por la actualidad de la apología, tomando pie de un estudio del Contra Celso de Orígenes. Dotado, el trabajo, de exposición clara y sencilla –difícil de lograr en un escrito–, apuesta por la formación y la doctrina para este mundo neopagano y, hasta cierto punto, contrario a lo que la Iglesia enseña.
En el área de filosofía y humanidades, el trabajo premiado fue de literatura, una historia vocacional que puede ser la de muchos jóvenes que tienen inquietud por el sacerdocio.
Una lectura de este concurso y la respuesta que se le ha dado es la de que hay que incentivar más la lectura y la expresión por escrito, objetivo primordial del concurso mismo.
Felicidades a los ganadores, y que sigan investigando, que se puede ayudar mejor con “más letras”.
Felicidades por no dejarse morir un Concurso que ha ayudado tanto a subir el nivel literario, filosófico y teológico del Seminario. Ojalá lo apoyen fuerte, porque la exclencia no viene sola, hay que cultivarla y estimularla ¡Animo, pues!
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