Me ha dado mucha alegría el haber sido invitado a dar un “mensaje” a un grupo de romeros que visitaron una pequeña y reciente ermita cerca del pueblo. Se trata de la comunidad de San Jorge La Laguna, comunidad a la que he atendido pastoralmente en numerosas ocasiones, y en donde conservo muchos amigos.
He hablado de la necesidad de la madre en una familia y, por ende, la necesidad de la presencia y la intervención de la Virgen María en la familia de la Iglesia; también sobre el carácter cristológico del rezo del Rosario; han aflorado también unos recuerdos personales sobre el rezo del Santo Rosario.
En fin, un alegre domingo de pastoral y de formación sacerdotal en el Seminario.
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