Según una tradición, San Lucas pintó un retrato de la Virgen María, que se guarda en la Basílica de Santa María La Mayor, en Roma. |
Exhortaba hoy a las religiosas, con quienes celebré la Santa Misa, a agradecerle a Dios el don de la Sagrada Escritura, que recoge lo que Dios ha querido transmitirnos para nuestra salvación. Agradecer, también, la fidelidad y disponibilidad de San Lucas para dejarse guiar por el Espíritu Santo para escribir –en consonancia con la Tradición- su Evangelio y el libro de los Hechos. ¡Palabra de Dios en lenguaje de los hombres!
San Lucas se fijó, como dice también la Tradición, en la predicación de San Pablo y puso por escrito lo que consideró que era provechoso para nuestra fe. La fidelidad en la transmisión de esa tradición sólo se explica por el amor que tenía a Dios y a quien era su maestro (San Pablo).
Propósito, pues, ha de ser el de aprovechar esa Escritura y leerla con amor para bien de nuestra alma.
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