Mientras conversaba con un sacerdote, y él veía la prensa, noté que comentaba con emoción que ese día era el Super Bowl 50 (7 de febrero pasado), la final de futbol americano. Aunque más o menos entiendo en qué consiste el juego, sin embargo, como con lo demás, no me quita el sueño no poder verlo.
Pues, Doritos, una de las mil clases de boquitas, sacó este comercial siguiente. Según comentarios (ver aquí), a los estadounidenses proabortistas no ha gustado. No me extrañaría, pues se ve allí a un precioso e inteligente bebé (lo de inteligente no es porque le guste Doritos, ciertamente) que tiene sus apetencias.
Este video, al parecer, fue uno de los comerciales que pasaron durante la transmisión del Super Bowl, por lo que lo habrían visto millones de personas. ¡Qué bueno! Aunque esté en inglés, el video se entiende.
No hay comentarios:
Publicar un comentario