Jesús sube al Cielo pero se queda con nosotros

     Con alegría hoy celebré la Santa Misa en el Monasterio de Monjas de la Visitación y, luego, en el Colegio de Hermanos Maristas en la zona 6 de la Capital. Me dio mucha alegría compartir con la feligresía estos momentos.

     Como comenta Georges Chevrot (en su libro "La Victoria de la Pascua"), cuando un ser querido se ausenta nos quedamos tristes, tanto más cuanto más le hemos amado. Aún más cuando la ausencia es definitiva. Sin embargo, cuando los discípulos regresaron del monte de la Ascensión, regresaron alegres. Pero, de dónde nace esa alegría? Es que el Señor se ha ido, pero se ha quedado a la vez.

     Tres pasajes son clave en el evangelio según san Mateo: 1,20; 18,20 y 28,20, este último pasaje lo hemos escuchado hoy en la Santa Misa. Jesucristo, es el Dios con nosotros. La Iglesia es la comunidad convocada por Dios y en la que habita Cristo (Él es el Emmanuel, el Dios con nosotros); lo está verdadera y realmente en la Eucaristía, pero está también en la demás labor de evangelización y de salvación de la Iglesia.

     Me parece que a ti y a mí nos falta cultivar un poco más la conciencia de la presencia de Cristo en la Iglesia, en mi propia vida.

    ¡Feliz Domingo de la Ascensión del Señor a los Cielos!