jueves, 1 de octubre de 2015

Gracias, amigos

He querido poner esta imagen del Papa, presentando la Forma recién consagrada (Cristo mismo). Es la mejor y más agradable Acción de gracias (eso significa "Eucaristía") a Dios.
     Gracias por sus felicitaciones en este día especial, en estos días de fiesta. Personalmente, he celebrado el aniversario de la beatificación de D. Álvaro, mi santo (San Miguel Arcángel), el patrono de los biblistas (aprendiz de...), el cumpleaños, la fundación de la Obra (mañana)...

     La cifra es redonda, de profundo significado bíblico: 40. ¿Qué tal, eh...? No sé si suceda, pero suelen decir que esta etapa es de "crisis"... Al menos  he pasado tan ocupado esta época, que ni la he sentido...

     ¿Qué significado tiene esta edad, este tiempo? Ninguna negativa o peyorativa; al contrario, todo positivo: puesta la vida en manos de Dios, vamos hacia adelante, hacia lo que Dios va pidiéndonos y tratamos de cumplir...

     Últimamente me he recordado de aquella anécdota, que creo haber contado ya: la gentil señora que en determinado momento, en este año, me preguntó: "¿cuáles son sus planes, Padre?" Le respondí, con la mayor gentileza con que pude, que, al haberme hecho sacerdote, no tenía más planes que tratar de acercarme más a Dios y ayudar a los demás a que traten de hacerlo igualmente.

     ¿Planes personales? A corto plazo, siempre los hay, los propios de la condición de quien tiene responsabilidades, de quien debe responder a sus encargos. Pero, planes a largo plazo, obedecer y tratar de "echarle ganas" -como solemos decir por aquí- a lo que Dios nos pide, con espíritu optimista.

     Una fecha tan señalada como ésta es motivo de acción de gracias. Yo tengo muchos, muchos motivos para agradecerle a Dios. Pero, no sólo eso: también soy consciente de haber "metido las patas" tantas veces, de lo que debo arrepentirme (¿quién no?).

     Me parece que la actitud más real y ajustada a la de alguien que quiere unirse más a Dios, en una fecha similar, es la que fue un tanto característica de Mons. Álvaro del Portillo: "Gracias. Perdón. Ayúdame más". Esa es y será mi oración al Señor. Sin él no tendría sentido nada, no tendría sentido lo que he tratado, trato y trataré de hacer.

     Les agradezco, amigos, su cercanía, su cariño, sus oraciones. Estamos para ayudarles en lo que podamos. Dios les bendiga.

4 comentarios:

  1. La vida a veces se pone cuesta arriba, pero siempre se puede si se cuenta con Dios. Felices cuarenta.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, P. Ángel. Aquí estamos, entrando en los 40, pero muy felices, viviendo al día. Un fuerte abrazo.

      Eliminar
  2. ¡Muchas felicidades, cuarentón! Te encomiendo. Saludos a toda tu familia

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es un gusto recibir su felicitación, P. Luis. Gracias por los saludos a mi familia, que se los daré con gusto. Un abrazo.

      Eliminar