viernes, 24 de julio de 2015

En vísperas de la celebración de Santiago Apóstol

   Atendiendo a la amable invitación del P. Alfredo, párroco de Santiago Apóstol, Santiago Atitlán, fui a celebrar la Santa Misa de la Novena del Santo Patrono. Y me correspondió, con gran alegría, celebrar la Santa Misa de la Víspera. La iglesia estaba repleta.

    En la homilía les comencé diciendo que "nos congratulamos al celebrar a nuestro Santo Patrono, porque en mi pueblo, Patzicía, también celebramos a Santiago Apóstol. Ahora ya tuvimos la alegría de ver a los atitecos en Patzicía que, año con año, iban a prestar la imagen del Patrono -una que se encuentra allí-, puesto que no había una propia". Se sonrieron.

     En días recientes ya tuvieron la dicha de "estrenar" imagen del Patrono, una imagen de buena factura, representando al Santiago Matamoros. Al Santo encomendé tantas intenciones, a cada persona en la Santa Misa, a cada familia y al pueblo todo, pues ha sido puesto bajo su augusto patrocinio este bendigo pueblo.

     Por supuesto, adoré a Jesús en la Eucaristía, expuesto en la capilla de adoración perpetua. También, ante la imagen del Patrono, recé por los feligreses de esa parroquia. A la vez, encomendé mi pueblo, Patzicía, que también está de fiesta, y a Europa, especialmente a España, cuyo Patrono también es Santiago Apóstol.

Ésta es la capilla de adoración perpetua, con muchos feligreses dando gracias por la Misa recién celebrada.
  
Así de engalanada estaba la iglesia de Santiago Atitlán.

La nueva imagen del Patrono.

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