Los sacerdotes y otras personas, al final del día, rezamos las Completas, oraciones de la Liturgia de las Horas, la Hora última que se reza justo antes del descanso nocturno. Lo último que el sacerdote invoca es: "El Señor Todopoderoso nos conceda una noche tranquila y una muerte santa". Y, en seguida, el descanso...
Cerrar los ojos y dormir en paz... Eso no tiene precio, es un regalo de Dios. ¿Cuál será la fórmula para dormir en paz? Leía el otro día que la fórmula es tener la conciencia tranquila.
Ofrecer al Señor todo lo que hemos hecho en el día es agradable a Él; si hemos metido la pata, le pedimos perdón y, esperar despertar el día siguiente, a seguir la tarea que nos ha encomendado. Si toca otra cosa..., ¡enhorabuena!
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