Me enviaron este mini-artículo sobre una regla ortográfica sobre el uso del género. Consideré oportuno omitir la dedicatoria del artículo, mencionada en el último párrafo. El artículo reza así:
En español, el plural en masculino implica ambos géneros. Así que, al dirigirse al público, NO es necesario ni correcto decir "guatemaltecos y guatemaltecas", "compañeros y compañeras", "hermanos y hermanas", etc., como algunos verbosos pusieron de moda y hoy en día otros ignorantes (tanto políticos, como comunicadores) a nivel nacional por TV continúan con el error.
En español, el plural en masculino implica ambos géneros. Así que, al dirigirse al público, NO es necesario ni correcto decir "guatemaltecos y guatemaltecas", "compañeros y compañeras", "hermanos y hermanas", etc., como algunos verbosos pusieron de moda y hoy en día otros ignorantes (tanto políticos, como comunicadores) a nivel nacional por TV continúan con el error.
Decir ambos géneros es
correcto, SÓLO cuando el masculino y el femenino son palabras diferentes, por
ejemplo: "mujeres y hombres", "toros y vacas", "damas
y caballeros", etc.
Ahora viene lo bueno: detallito
lingüístico: ¿”presidente” o “presidenta”?
Aprendamos bien el español de
una vez por todas: no estoy en contra del género femenino, sino del mal
uso del lenguaje. Por favor, déjense ya de incultura, desconocimiento u
ocurrencia: ¿”Presidente” o “Presidenta”?
En español existen los
participios activos como derivados verbales: Como por ejemplo, el participio
activo del verbo atacar, es atacante; el de sufrir, es sufriente; el de cantar,
es cantante; el de existir, existente; etc.
¿Cuál es el participio activo
del verbo ser?: El participio activo del verbo ser, es "ente". El que
es, es el ente. Tiene entidad. Por esta razón, cuando queremos nombrar a la
persona que denota capacidad de ejercer la acción que expresa el verbo, se le
agrega la terminación 'ente'.
Por lo tanto, a la persona que
preside, se le dice presidente, no presidenta, independientemente de su género.
Se dice capilla “ardiente”, no
“ardienta”. Se dice “estudiante”, no “estudianta”. Se dice “adolescente”, no “adolescenta”.
Se dice “paciente”, no “pacienta”. Se dice “comerciante”, no “comercianta”. Se
dice “cliente”, no “clienta”.
Dilma Rousseff, actual
Presidente de Brasil, ha recibido las felicitaciones del Presidente Calderón y
su Gobierno, como "Presidenta electa", no por motivos ideológicos,
sino por ignorancia de la gramática de la lengua española.
Un mal ejemplo sería: “La
pacienta era una estudianta adolescenta sufrienta, representanta e integranta
independienta de las cantantas y la velaron en la capilla ardienta ahí
existenta...”
Que mal suena ahora “presidenta”,
¿no? Es siempre bueno aprender de qué y cómo estamos hablando.
interesante, Gracias Miguel.
ResponderEliminarMuy bueno, este es el papel de los medios de comunicación, educar y hacer crecer en cultura, que mucha falta nos hace, ya que como guatemalteco, amante de mi país, no estoy muy contento con lo que identifican como "chapín", que lo traducen con actos mediocres y faltos de gusto. Felicidades P. Mike, me gustó mucho.
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